Se suele hablar mucho sobre tener un buen estado de forma, pero pocas veces, se habla de cómo, de manera sencilla y rápida, podemos saber si realmente estamos en forma.
Existen numerosos test que pueden ayudarnos a medir este parámetro. Y uno de los más sencillos es el Test de Ruffier-Dickson, para el cual sólo necesitarás un cronómetro y medir tus pulsaciones.
Para medir tus pulsaciones simplemente por tus dedos índice y corazón sobre la carótida o utiliza un pulsómetro.
A continuación te explico de forma detallada cómo se hace:
1. Mide tus pulsaciones en reposo durante 15 segundos y multiplica el resultado por 4.
Este valor será P1.
2. Realiza 30 sentadillas durante 45 segundos y nada más terminar, mide tus pulsaciones durante otros 15 segundos y multiplica por 4 el resultado obtenido.
Este valor será P2.
3. Descansa 45 segundos tras la medición del paso 2 y vuelve a tomarte las pulsaciones durante 15 segundos. Vuelve a multiplicar por 4 el resultado.
Este valor será P3.
4. El último paso es sencillo. Realiza la siguiente operación mátemática:
((P1+P2+P3)-200)/10
5. Compara el resultado obtenido con esta tabla…

…y ya tienes el resultado de tu aptitud y estado de forma física.
Si los valores obtenidos son favorables, desde aquí, ¡mi más sincera enhorabuena!
En caso contrario, o si no estás del todo satisfecho/a con el resultado, no te desanimes, nunca es tarde para comenzar a cuidarte y estar en forma. ¿Te animas a entrenar con nosotros y repetir el test en unas semanas para ver los cambios? ¡Pincha aquí!